17 miércoles
Verde / Blanco
Feria
o SAN ROBERTO BELARMINO,
Obispo y Doctor de la Iglesia
o de SANTA HILDEGARDA DE BINGEN,
Virgen y Doctora de la Iglesia]
MR pp. 794 y 896 [824 y 935] / Lecc. II p. 799
Nacido en Toscana (Italia), entró muy joven en la Compañía
de Jesús y dio clases en Lovaina y Roma. Allí escribió sus
“Controversias” y dirigió espiritualmente a san Luis Gonzaga.
Nombrado por el Papa cardenal-arzobispo de Capua, manifestó
su gran habilidad pastoral. Pero tuvo que volver a Roma como
consejero papal (1542-1621).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Ez 34
Buscaré a mis ovejas, dice el Señor, y les daré un pastor que
las apaciente, y yo, el Señor, seré su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que para defender la fe de tu Iglesia colmaste a
san Roberto Belarmino de admirable sabiduría y fortaleza, por su
intercesión concede a tu pueblo el gozo de profesar íntegramente
esa misma fe. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y
reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Realmente es grande el misterio del amor de Dios.]
De la primera carta del apóstol san Pablo a Timoteo 3, 14-16
Querido hermano: Te escribo estas cosas con la esperanza de
ir a verte pronto. Pero si tardo en llegar, quiero que sepas desde
ahora cómo debes de actuar en la casa del Dios vivo, que es la
Iglesia, columna y fundamento de la verdad.
Realmente es grande el misterio del amor de Dios, que se
nos ha manifestado en Cristo, hecho hombre, santificado por
el Espíritu, contemplado por los ángeles, anunciado a todas las
naciones, aceptado en el mundo mediante la fe y elevado a la
gloria. Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 110
R. Alabemos a Dios de todo corazón.
Quiero alabar a Dios, de corazón, en las reuniones de los
justos. Grandiosas son las obras del Señor y para todo fiel, dignas
de estudio. R.
De majestad y gloria hablan sus obras y su justicia dura para
siempre. Ha hecho inolvidables sus prodigios. El Señor es piadoso
y es clemente. R.
Acordándose siempre de su alianza, él le da de comer al que
lo teme. Al darle por herencia a las naciones, hizo ver a su pueblo
sus poderes. R.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 63. 68
R. Aleluya, aleluya.
Tus palabras, Señor, son espíritu y vida. Tú tienes palabras de
vida eterna. R. Aleluya.
EVANGELIO
[Tocamos la flauta y ustedes no bailaron, cantamos canciones
tristes y no lloraron.]
Del santo Evangelio según san Lucas 7, 31-35
En aquel tiempo, Jesús dijo: “¿Con quién compararé a los
hombres de esta generación? ¿A quién se parecen? Se parecen
a esos niños que se sientan a jugar en la plaza y se gritan los
unos a los otros: ‘Tocamos la flauta y no han bailado, cantamos
canciones tristes y no han llorado’.
Porque vino Juan el Bautista, que ni comía pan ni bebía vino, y
ustedes dijeron: ‘Ese está endemoniado’. Y viene el Hijo del hombre,
que come y bebe, y dicen: ‘Este hombre es un glotón y un bebedor,
amigo de publícanos y pecadores’. Pero sólo aquellos que tienen la
sabiduría de Dios, son quienes lo reconocen”. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN: Este pasaje sólo tiene sentido si se
lee conjuntamente con los precedentes versículos de
Lc 7, 24-30 [«¿Qué Salieron a ver en el desierto?»...].
Versículos desafortunadamente omitidos en el texto
de la liturgia de este día, y que evocan a Juan el
Bautista. Jesús alude aquí a un antiguo juego de los
niños hebreos para condenar la indiferencia de los
que permanecen insensibles a la proclamación de su
mensaje. Lo que se quiere decir con esto es que los
fariseos, en la práctica, se comportaron como niños
caprichosos. Algo que no se les pudo reprochar ni
siquiera a los ya bastante desacreditados publicanos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira favorablemente, Señor, las ofrendas que presentamos en
tu altar en esta festividad de san Roberto Belarmino, para que
nos alcancen tu perdón y den gloria a tu nombre. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 15, 16
No son ustedes los que me han elegido, dice el Señor, soy
yo quien los ha elegido y los ha destinado para que vayan y den
fruto y su fruto permanezca.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados por estos sagrados misterios, Señor, te suplicamos
humildemente que, a ejemplo de san Roberto Belarmino, nos
esforcemos en profesar lo que él creyó y en poner en práctica lo
que enseñó. Por Jesucristo, nuestro Señor.