14 jueves
Verde / Blanco
o SAN CAMILO DE LELIS, Presbítero
MR pp. 748 y 928 [772 y 968] / Lecc. II p. 572
Una vida desenfrenada lo condujo a internarse en el Hospital de Incurables de Roma. Lo conmovió el abandono en que vivían los enfermos, y se hizo enfermero. Algunos compañeros lo siguieron (1582) y bajo su dirección fundaron "los Siervos de los Enfermos". Ya siendo sacerdote, pasó la mayor parte de su vida al lado de los miembros sufrientes de Cristo (1550-1614).
ANTÍFONA DE ENTRADA Mt 25, 34. 36. 40
Vengan, benditos de mi Padre, dice el Señor, porque estuve enfermo y me visitaron. Yo les aseguro que cuanto hicieron con el
más insignificante de mis hermanos, conmigo lo hicieron.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que concediste al presbítero san Camilo de Lelis la gracia de un amor especial por los enfermos, infunde en nosotros, por su intercesión, el espíritu de tu caridad, para que, sirviéndote en nuestros hermanos, podamos, en la hora de nuestra muerte, presentarnos ante ti llenos de confianza. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Despierten jubilosos, los que habitan en los sepulcros.]
Del libro del profeta Isaías 26, 7-9. 12. 16-19
La senda del justo es recta porque tú, Señor, le allanas el sendero. En el camino de tus mandamientos te buscamos, anhelando, Señor, tu nombre y tu recuerdo.
Mi alma te desea por la noche y mi espíritu te busca por la mañana, porque tus mandamientos son la luz de la tierra y enseñan justicia a los habitantes del orbe.
Tú nos darás, Señor, la paz, porque todo lo que hemos hecho eres tú quien lo ha hecho por nosotros.
Acudimos a ti, Señor, en el peligro, cuando nos angustiaba la fuerza de tu castigo. Como una mujer que va a dar a luz, que se retuerce y
grita angustiada, así éramos, Señor, en tu presencia: concebimos y nos retorcimos, ¡pero lo único que hemos dado a luz ha sido viento! No le hemos dado salvación al país, no le han nacido habitantes al mundo.
Tus muertos vivirán, sus cadáveres resucitarán, despertarán jubilosos los que habitan en los sepulcros, porque tu rocío es rocío luminoso y la tierra de las sombras dará a luz. Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 101, 13-14ab y 15.16-18.19-21
R. El Señor tiene compasión de nosotros.
Tú, Señor, reinas para siempre y tu fama pasa de generación en generación. Levántate y ten misericordia de Sión, pues ya es tiempo de que te apiades de ella. Tus siervos aman sus piedras y se compadecen de sus ruinas. R.
Cuando el Señor reedifique a Sión y aparezca glorioso, cuando oiga el clamor del oprimido y no se muestre a sus plegarias sordo, entonces temerán al Señor todos los pueblos, y su gloria verán los poderosos. R.
Esto se escribirá para el futuro y alabará al Señor el pueblo nuevo, porque el Señor, desde su altura santa, ha mirado a la tierra desde el cielo, para oír los gemidos del cautivo y librar de la muerte al prisionero. R.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 11, 28
R. Aleluya, aleluya.
Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados por la carga, y yo les daré alivio, dice el Señor. R. Aleluya.
EVANGELIO
[Soy manso y humilde de corazón.]
Del santo Evangelio según san Mateo 11, 28-30
En aquel tiempo, Jesús dijo: "Vengan a mí, todos los que están
fatigados y agobiados por la carga, y yo los aliviaré. Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán descanso, porque mi yugo es suave y mi carga, ligera". Palabra del Señor.
REFLEXIÓN: • Este pasaje –en el que se compendian muchos de los temas predilectos de Isaías– es una hermosa plegaria y un canto de sincera alabanza a Dios. El cotidiano anhelar al Señor sólo será fecundo si va acompañado, de parte del hombre, de una confianza
franca y cordial en Aquel que es capaz de resucitar incluso a los que «yacen en los sepulcros». Israel, aun en los peores desastres, supo ver un castigo saludable que no lo ha apartado de Dios. Ahora espera que la nación pueda volver a florecer, mientras desaparecen sus altivos perseguidores... • En este texto, exclusivo de San Mateo, se nos recalca que la ley de Cristo es «yugo llevadero» y «carga ligera». Su clima es la amistad, que genera alegría y confianza en especial de parte de los «sencillos». Hay quienes confunden esta ley con un cúmulo de mandatos, prohibiciones y temores al castigo. Esto contradice el programa de «liberación» que Él expuso en la sinagoga de Nazaret e invalida la invitación a la felicidad contenida en las «bienaventuranzas». Jesús reprobó una religiosidad superficial y una moral de apariencias, incapaces de transmitir el consuelo de la auténtica salvación.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acoge, Señor, las ofrendas de tu pueblo, para que, al celebrar la obra de la caridad inmensa de tu Hijo, seamos confirmados en el amor a ti y al prójimo, a ejemplo de san Camilo de Lelis. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 15, 13
Nadie tiene un amor más grande, que el que da la vida por sus amigos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Renovados por este santo sacramento, concédenos, Señor, seguir los ejemplos de san Camilo de Lelis, que te honró con su incansable piedad y con su inmensa caridad hizo tanto bien a tu pueblo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ACTIVIDAD DIOCESANA
Jubileo Circular: Jueves 14, Viernes 15 y Sábado 16: San Dimas, Virgen de Guadalupe (La Venta del Astillero), Ntra. Sra. del Refugio (El Batán), San Antonio (Polanco), Ntra. Sra. de la Defensa (Col. el Mante), Madre de Dios (El Salto), Ntra. Sra. del Rosario (Mezquital del Oro), Ntra. Sra. del Rosario (Toyahua).