El décimo arzobispo de Guadalajara

J. Guadalupe Miranda Martínez, Pbro.

Se ofrecen algunos datos de relieve centrados en la figura y la participación social y eclesial que ha tenido en casi un siglo y medio el arzobispo de Guadalajara

Originario de Mascota, Jalisco, donde nació hace 62 años, el nuevo arzobispo de Guadalajara, el señor cardenal don José Francisco Robles Ortega cursó su formación sacerdotal en los Seminarios de Autlán, Guadalajara y Zamora; luego pasó tres años en Roma estudiando Teología Dogmática (1976-1979). Su ministerio sacerdotal lo desarrolló en la diócesis de Autlán. Después  fue nombrado obispo auxiliar de Toluca (1991), para convertirse luego en obispo propio de esa sede (1995). En 2003 pasó a Monterrey como su undécimo arzobispo y en 2007 el Papa Benedicto xvi lo creó cardenal.

En Guadalajara es el décimo arzobispo, lo que significa que nueve arzobispos han cubierto, prácticamente, los 150 años que está por cumplir esta sede metropolitana (2013). Por orden de duración en el gobierno de la  Arquidiócesis aparecen:  José Garibi Rivera (1936-1969),  Pedro Loza y Pardavé (1868-1898), Francisco Orozco y Jiménez (1912-1936), José Salazar López (1970-1987), Juan Sandoval Iñiguez (1994-2011), José de Jesús Ortiz Rodríguez (1902-1912), Juan Jesús Posadas Ocampo (1987-1993), Pedro Espinosa y Dávalos (1863-1866) y Jacinto López y Romo (1899-1900).

De estos diez arzobispos, todos han sido cardenales a partir del señor José Garibi Rivera (1958) por lo que ya se considera sede cardenalicia a Guadalajara. El señor Garibi fue creado cardenal por el Papa Juan xxiii y participó en la elección del Papa Pablo vi. El señor Salazar fue creado cardenal por el Papa Pablo vi (1973) y participó en la elección de Juan Pablo I y Juan Pablo ii. El señor Posadas fue creado cardenal por  el Papa Juan Pablo ii (1991) y no participó en ninguna elección pontificia porque le abreviaron la existencia. El señor Sandoval fue creado cardenal por Juan Pablo ii (1994) y participó en la elección de Benedicto xvi.

Haciendo parejas, resulta que Juan Pablo ii creó dos cardenales de la sede tapatía; el señor Salazar es el único cardenal de Guadalajara que, hasta ahora, ha participado en dos cónclaves. Así mismo, son dos los cardenales que provienen de otras diócesis: el señor Posadas de Morelia y el señor Robles de Autlán. También aparece que desde el 7 de diciembre de 2011, Guadalajara cuenta con dos cardenales electores y elegibles en caso de que se celebre un cónclave antes del 28 de marzo de 2013. Cabe tener en cuenta, además, que el nuevo arzobispo tiene dos nombres emblemáticos para Guadalajara: José Francisco, es decir, esos nombres los llevaron José Garibi  Rivera, José Salazar López y Francisco Orozco y Jiménez que han cubierto el período más largo (1912-1987), fecundo y constructivo  en la existencia de la Arquidiócesis.

También recordemos que el señor Francisco Robles pidió, no por mera casualidad, que la  noticia de su nombramiento como arzobispo  de Guadalajara se diera el 7 de diciembre, festividad del gran obispo de Milán, san Ambrosio; sin duda, alguna relación con la misión de este pastor querrá establecer el nuevo arzobispo.

En cuanto a la edad de los arzobispos al asumir el gobierno de la sede tapatía, Pedro Espinoza contaba con 71 años, Jacinto López 68, Francisco Robles 62, Juan Jesús Posadas y Juan Sandoval 61, José Salazar 60, Pedro Loza 57, José de Jesús Ortiz 52, Francisco Orozco y Jiménez 48 y José Garibi Rivera 47 años.

De estos diez arzobispos, cinco son originarios de Jalisco y cinco de otros estados: Jacinto López, de Encarnación; José Garibi Rivera, de Guadalajara; Juan Sandoval, de Yahualica; José Salazar, de Ameca y Francisco Robles de Mascota.  Pedro Espinosa, de Tepic, Pedro Loza, de la Ciudad de México; Francisco Orozco y Jiménez, de Zamora; José de Jesús Ortiz, de Pátzcuaro y Juan Jesús Posadas de Salvatierra.

En cuanto a la procedencia de los arzobispos antes de ocupar la sede tapatía, Pedro Espinosa y José Garibi Rivera siempre estuvieron en Guadalajara; Pedro Loza llegó de Hermosillo con 16 en esa sede; Jacinto López de Monterrey, con 13 años; José de Jesús Ortiz, de Chihuahua, con 8 años; Francisco Orozco y Jiménez, de San Cristóbal de Las Casas, con 10 años; José Salazar, de Zamora, con 9 años; Juan Jesús Posadas Ocampo, de Tijuana y Cuernavaca con 12 y 5 años respectivamente;  Juan Sandoval, de Ciudad Juárez, con 6 años y Francisco Robles de Monterrey y Toluca con 12 y 9 años, es decir, es el arzobispo que asume su responsabilidad en Guadalajara con más tiempo en el desempeño episcopal.

¡Bienvenido! La comunidad católica de Guadalajara con sus sacerdotes lo recibe  con júbilo y muchas esperanzas. Usted es el segundo arzobispo originario de Jalisco que llega a esta sede procedente de Monterrey. Esperamos que su episcopado sea prolongado y dé mucho fruto.